Cómo reducir el consumo fantasma y ahorrar en tu factura de luz.

En la búsqueda de la eficiencia energética en nuestros hogares, nos encontramos con un desafío invisible pero significativo: el consumo fantasma. 

Al parecer, este fenómeno que afecta a la mayoría de los dispositivos electrónicos, puede representar hasta el 10% de nuestro consumo total de electricidad. 

Por consiguiente, en este artículo analizaremos qué es el consumo fantasma, por qué se produce y, lo más importante, cómo podemos reducirlo para ahorrar en nuestra factura de luz.

¿Qué es el consumo fantasma?

Especialistas en materia de energía sostienen que el llamado “consumo fantasma” refiere al gasto de energía que ocurre cuando los dispositivos electrónicos están en modo de espera o apagados pero aún están conectados a la corriente eléctrica. 

Esto implica un consumo residual que, en la mayoría de los casos, pasa desapercibido. Reparación de Electrodomésticos SAT.

El impacto de «Standby» en tu factura de luz.

Ahora que conocemos qué es el consumo fantasma, es hora de analizar cómo afecta a nuestros gastos mensuales. De hecho, aunque pueda parecer insignificante, según diversos estudios, este fenómeno puede representar un 10% del consumo total de electricidad en algunos hogares. 

Por lo tanto, este es un tema especialmente preocupante dado que generalmente no tenemos control sobre este tipo de gasto. Por ejemplo, imaginemos la cantidad de dispositivos que mantienen una conexión constante a la corriente eléctrica: televisión, ordenadores, asistentes de voz y otros aparatos. 

Asimismo, aunque el gasto individual de cada uno pueda ser bajo, cuando sumamos todos estos dispositivos, la cantidad de energía consumida se vuelve significativa.

Pasos para reducir este gasto innecesario.

Eliminar ese 10% adicional  en nuestras facturas debido al consumo en stand by no es una tarea insuperable. Por ello a continuación te presentamos algunas estrategias efectivas que puede aplicar:

1. Desenchufar dispositivos.

La opción más simple y efectiva es desenchufar los dispositivos cuando no se estén utilizando. Esto garantiza que los electrodomésticos no consuman energía de manera inadvertida. Incluye no solo la televisión o el ordenador, sino también cargadores, lámparas y otros dispositivos conectados a la corriente eléctrica.

2. Emplear la función de ahorro de energía.

Muchos dispositivos cuentan con una función de ahorro de energía que optimiza su gasto. Ahora, si cuentas con equipos que no presentan esta opción, directamente habrá que apagarlos por completo y desconectarlos. 

3. Utilizar regletas con interruptores.

Para simplificar el proceso, puedes instalar regletas con interruptores de apagado en tu hogar o negocio. Esto te permitirá apagar varios dispositivos de manera simultánea y, si incorporas temporizadores, podrás cortar la corriente automáticamente durante ciertas horas.

4. Usar dispositivos de control de uso.

En el mercado existen temporizadores, programadores y controladores que registran el consumo de tus electrodomésticos. De hecho, algunas aplicaciones móviles también pueden monitorizar el gasto de energía en tu vivienda. 

No lo pienses dos veces, estos recursos te ayudarán a gestionar de manera eficiente el consumo fantasma y reducirlo al mínimo. Reparación de Electrodomésticos SAT.

5. Optar por electrodomésticos eficientes.

Considera reemplazar tus electrodomésticos más antiguos por modelos más eficientes en términos de consumo energético. Esta inversión a largo plazo no solo te permitirá reducir el consumo fantasma, sino que también mejorará la eficiencia energética de tu hogar en general.

En definitiva, con unos simples cambios en nuestros hábitos y la adopción de tecnologías eficientes, podemos reducir este gasto innecesario y lograr un mayor control sobre nuestro consumo de energía.

(S.M.C)