Sabemos que los electrodomésticos son aliados indispensables para cualquier cocina, ya que simplifican desde la cocción hasta la limpieza.
Aún así, el funcionamiento de muchos de ellos implica un consumo energético que impacta directamente en las facturas energéticas.
De hecho, si bien los calentadores, termotanques, refrigeradores y secadoras suelen encabezar la lista de los más «sedientos» de energía, existe otro aparato, cada vez más popular, que puede convertirse en un silencioso «vampiro» energético, incluso cuando parece estar apagado.
¿De quién hablamos? Del horno eléctrico. Este versátil electrodoméstico, que transforma la electricidad en el calor necesario para cocinar, puede consumir entre 2.000 y 5.000 vatios por hora , según datos de «MyAppliances«.
¿Cuál es el consumo de uno de los electrodomésticos más innovadores de la cocina?
Según describe «Schneider Electric Blog«, el consumo por hora del horno electríco rondaría entre 300 y 800 vatios. Esto se traduce en un consumo mensual que oscila entre los 40 y 90 kWh si su uso es regular.
Pues bien, para ponerlo en perspectiva, un refrigerador, apenas consume entre 300 y 800 vatios por hora. En este caso, la clave radica en la alta demanda de energía que requiere el horno para alcanzar y mantener las temperaturas de cocción.
No obstante ello, el consumo real varía claramente según el tamaño, el modelo y, crucialmente, el tiempo de uso.
Entonces, muchos consumidores se preguntan ¿cómo podemos disfrutar de las bondades del horno eléctrico sin que nuestra factura de luz se dispare?
Trucos inteligentes para un horno eficiente
- Cocina «en lote»: Aproveche el calor generado para cocinar varios platos a la vez. Optimice la horneada.
- Puerta cerrada, energía ahorrada: Evite abrir el horno innecesariamente, ya que cada vez que lo hace se pierde calor y el horno debe trabajar más para recuperarlo.
- Apaga antes de tiempo: Finaliza la cocción unos minutos antes y deja que el calor residual termine el trabajo.
- El desenchufe estratégico: Una vez que el horno esté completamente frío y no lo vayas a usar por un tiempo, considera desenchufarlo. Recuerda, algunos modelos pueden seguir consumiendo una pequeña cantidad de energía en «standby».
- Mantenimiento al día: Un horno limpio y en buen estado funciona de manera más eficiente. Revise las juntas de la puerta para evitar fugas de calor.
- Ojo con los reinicios: Tal como sugiere «Repairs4U«, si experimenta un corte de energía o un problema con el panel digital, asegúrese de que el horno esté apagado antes de reiniciarlo.
En definitiva, si se implementan sencillos pero efectivos consejos, se podrá reducir el consumo energético del horno eléctrico, aligerando tu factura de luz y contribuyendo a un hogar más sostenible.
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(S.M.C)